¿TIENE ANTÍDOTO LA VACUNA?

Para empezar, ¿Qué significa “Antídoto”? Los antídotos son sustancias químicas, o sea, un conjunto de medicamentos que, a través de diversos mecanismos, impiden, mejoran o hacen desaparecer algunos signos y síntomas de las intoxicaciones; es decir que neutralizan en algún grado los efectos de tóxicos y elementos que producen daño al organismo biológico.

En este caso, según la definición, mediante algún antídoto, de existir, podríamos neutralizar la toxicidad de las mal llamadas “vacunas”.

Analicemos un ejemplo: nadie en su sano juicio aceptaría tomar algunos tragos de un brebaje desconocido que cualquier otra persona, también desconocida, le ofreciera en la calle, negándose este desconocido además a declarar qué contenido posee el brebaje y mucho menos, si éste declara que no se hará cargo de los efectos que el brebaje pueda causar en la primera persona. NADIE aceptaría tal invitación…

Sin embargo, gran parte de la población mundial se siente hoy muy satisfecha, complacida y afortunada de que se le haya aplicado una inyección con contenido desconocido, fabricada por desconocidos, que, además, declaran que no se harán cargo (eso creen estos infelices nefastos) por los eventuales efectos causados.

Aún, cuando ya todo el mundo racional sabe que detrás de los mencionados desconocidos se encuentran lobos disfrazados de ovejas, y que quienes lo aconsejan (con intenciones de hacerla obligatoria) son criminales mentirosos cuya calaña no es posible pasar por alto. Como, por ejemplo, tenemos a la gran mayoría de los Jefes de Estado puestos allí por maniobras de la élite satánica; aquellos que no han aceptado pactar, porque no han querido ensuciar sus manos con sangre, están siendo asesinados.

Analicemos un poco: ¿De dónde proviene el término Vacuna? El origen, según Pasteur, proviene de la palabra latina vacca (vaca), en homenaje a los experimentos de Edward Jenner con la inoculación de la viruela bovina (también conocida como viruela vacuna). Una Vacuna, entonces, es un antídoto creado artificialmente que ha pasado por severas pruebas y fases de verificaciones (que a veces demoran hasta 20 años), y sometida a desarrollo y experimentación en animales antes de aplicarse al ser humano.

Nada que ver con estas “vacunas” que ya estaban listas a la par que el virus. ¿Alguien notó que no faltaron alcohol en gel, mascarillas, barbijos, lavandina, etc.? Ya estaba previsto; el negocio estaba en marcha, faltaban los ingenuos clientes.

Pero, además, muchos de quienes no han recibido la “vacuna”, claman por recibirla. Y quienes recibieron la primera dosis, reclaman por recibir la segunda y mejor si hay una tercera, es decir, en su infantil terror, QUIEREN MÁS VENENO.

Obviamente, se trata del viejo engaño, más viejo que el mismo ser humano: la ecuación PROBLEMA-REACCIÓN-SOLUCIÓN. Me preguntaba hasta cuándo van a usarla, pero es obvio que será mientras haya corderos y débiles mentales. Y esto, a pesar de que sus fabricantes, entre ellos el “amigo” Bill Gates (el anteojudo de las computadoras), hayan manifestado abiertamente en público, que sus intenciones son REDUCIR DRÁSTICAMENTE LA POBLACIÓN MUNDIAL, en nombre de revertir el cambio climático.

O sea, los lobos ya han avisado que habrán de hacerse cargo de las ovejas, y de los corderos, enunciando que, si no hay personas sobre el planeta, entonces no hay consumo de recursos ni tampoco, contaminación, por lo que el clima volverá a su normalidad. Las desastrosas inundaciones en China, justamente se deben a la búsqueda de generar otro problema, siendo que en realidad están siendo provocadas a propósito por el HAARP (emisiones de radiofrecuencia a la atmósfera con el fin de alterar el clima). Hasta los mismos militares chinos han dinamitado las represas, PERO SIN AVISAR A LA POBLACIÓN, a fin de que el daño sea mayor.

¿Cómo se desarrolla esta ecuación nefasta?

PROBLEMA: la diseminación mundial de un virus creado artificialmente y ya probado en su propia población, no por China, sino por decisión del Partido Comunista chino (PCCh) con intenciones de generar pánico, y de paso, eliminar un porcentaje de su población, aunque en realidad los especialistas han comprobado que este virus solamente tiene menos de un 1% de mortalidad, menos aún que la gripe.

REACCIÓN: el miedo inducido por los medios de comunicación (todos los muertos del mundo últimamente han fallecido por el virus; ya no hay más infartos, cáncer, etc.) y los periodistas imbéciles (los menos) y los comprados (los más), han generado semejante temor en la población, de forma que ésta hoy reacciona ingenuamente exigiendo una “vacuna” contra dicho virus.

“Vacuna” que no es una vacuna, dado que su propósito es introducir en el organismo metales pesados y óxidos de Grafeno, como ya explicara en otro artículo anterior. Esto provocará serios problemas, incluso hasta la muerte, en los vacunados (nunca mejor empleado el término, cualquier argentino lo entenderá, que han sido “vacunados”) y su efecto se acentuará al ser activado más tarde por radiaciones de microondas tales como las 5G.

SOLUCIÓN: los personeros de los gobiernos del mundo aprovechan a hacer negociados comprando “vacunas” mientras las industrias farmacéuticas llenan sus bolsillos de millones de dólares diarios, muchas de las cuales pertenecen a los lobos, entiéndase Bill Gates, Rockefeller, familia Soros, y otros elitistas satánicos. La solución resulta entonces, según las propias ovejas, en vacunarse.

Es decir: claramente el virus fue una trampa (problema) para que los corderos reaccionen y los globalistas les den su solución. La solución final, ante la cual, el elitista Adolf Hittler resultó ser un bebé de pecho.

Pero ellos, los satanistas, no matan personas; las están matando las “vacunas” solicitadas y hasta exigidas por los corderitos temerosos. Esto significa que los globalistas no se ven acusados de asesinar seres humanos, sino que éstos mismos piden de rodillas que los suiciden.

Ya se ha verificado que estas “vacunas” contienen metales pesados, venenosos para el organismo; además, Litio (cuyos efectos negativos generan somnolencia, temblor de una parte del cuerpo que no se puede controlar, debilidad, rigidez, espasmo o tensión muscular, pérdida de coordinación).

Bill Gates se compró casi todo el Litio de Sudamérica, mientras los ingenuos pensaban que era para fabricar las baterías de los autos eléctricos, cuando en realidad era para fabricar sus “vacunas” que contienen el Litio necesario para alterar las funciones mentales y emocionales.

Por otra parte, en el contenido se encuentran fuertes dosis de óxidos de Hierro (Magnetita) que hacen que se les queden pegadas las cucharitas en el lugar de la aplicación de la inyección, óxidos de Grafeno (superconductor activado por las radiaciones, que produce cortocircuitos en el sistema nervioso y en el cerebro del vacunado), y otros componentes desconocidos y difíciles de identificar, pero extraños al organismo humano.

Estos componentes enferman a las personas, las idiotizan, las paralizan, y hasta las matan debido al shock que se produce en el momento de la inoculación. Hay quienes declaran haber sentido correr un calor por las venas al ser inyectados, tal como cuando alguien es picado por un escorpión u otro animal venenoso; el sistema inmune intenta reaccionar, pero es rápidamente anulado por los componentes mortales. Quienes hayan sentido cómo el veneno de una picadura severa recorre sus venas, reconocerán enseguida los síntomas que he mencionado; lo he vivido en carne propia.

Pero, a todo esto, ¿Existe un antídoto para este veneno? Debo declarar que si, pero que no. Desde hace años, muchos mecánicos (por ejemplo) o personas con contacto directo con metales como el Cromo, el Níquel, el Vanadio, el Hierro de las herramientas, el Litio de la grasa, etc. se hacen dializar periódicamente a fin de eliminar estos elementos venenosos de su sangre, por lo que, en principio, diríamos que existe una manera ya conocida de eliminar los componentes nocivos, alargando el período de vida consecuentemente. Pero existen otras soluciones más económicas, caso de la Zeolita.

La administración de Zeolita tiene el efecto de absorber los componentes de los metales pesados. ¿Qué es la Zeolita? La Zeolita Natural es un grupo de minerales de origen natural, y es utilizada como absorbente de humedad y captador de contaminantes en agricultura, piscinas, tratamiento de aguas, filtración y otras aplicaciones de forma ecológica y sostenible. Es decir, la Zeolita (se vende por Internet) puede capturar estos metales pesados, los que así serán eliminados por la orina.

Lo que no se puede remediar es el contenido de óxidos de Grafeno, que por desgracia está dispuesto en porcentajes mayoritarios, y que, al estar compuesto por Carbono y Oxígeno, dos elementos amigables a la estructura física del humano, resultan muy difíciles de seleccionar y eliminar puesto que nuestros cuerpos están compuestos por aproximadamente un 20% de Carbono, y por Oxígeno incorporado como comburente, o sea, como elemento necesario para producir la combustión que nos da la energía para seguir con vida (3,5 ml de oxígeno necesario por cada kilogramo de peso y por cada minuto, para vivir).

En otras palabras, existe el antídoto, (sí, la Zeolita) pero no elimina la mayor gravedad del Grafeno. El Grafeno se activa por las microondas volviéndose altamente conductor y así, produciendo cortocircuitos que anulan los impulsos nerviosos normales; en otras palabras, inutiliza o daña gravemente al sistema nervioso: la persona ya no podrá moverse, su corazón ya no latirá y sus pulmones dejarán de procesar el oxígeno. Cualquiera se dará cuenta del resultado: la persona se muere asesinada por la “vacuna” produciéndose paros cardio-respiratorios.

O también se utiliza la mención del conocido “shock anafiláctico”, una reacción grave y a veces potencialmente mortal del sistema inmunitario a un antígeno (los componentes de la “vacuna”) al que una persona ha estado expuesta antes. La reacción puede incluir como efecto leve: picazón de la piel, edema, colapso de los vasos sanguíneos, desmayo, y en otros casos, dificultad para respirar y finalmente, la muerte.

Pero cuando la causa de la muerte es difícil de establecer, los médicos rápidamente diagnostican un “paro cardio-respiratorio”, es como decir: se murió porque el corazón dejó de latir y los pulmones dejaron de procesar el oxígeno, sea la razón que fuere que lo causó, como ejemplo del fallecimiento de Diego Maradona. De otra manera, significaría algo así como: “se murió porque dejó de vivir”, pero en palabras más técnicas e inapelables.

En resumen, entonces, las “vacunas” MATAN; estas “vacunas” de ahora que no son vacunas sino venenos destinados a deshacerse rápidamente de la población. O a lo sumo, algunos años después de aplicadas, ya que, si todos los vacunados fallecieran de inmediato, daría lugar a sospechas hasta de cualquier débil mental (que está visto que hay millones), que la “vacuna” los mató. Y ellos, los globalistas, no son tan idiotas como para ponerse en evidencia haciendo una maniobra tan obvia. Por tal razón, lamentablemente por ahora, seguirá sin respuesta la pregunta: ¿Tiene antídoto la vacuna?

El Sendero del Ser. Bendiciones. Leo.

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