LAS MOTIVACIONES DE LOS ÁNGELES Y LOS DEMONIOS (VERSIÓN II)

Blancanieves no podría haber pasado a la fama sin los siete enanitos, pero los siete enanitos no podrían ser hoy recordados sin Blancanieves.  Así es como una mano necesita de sus dedos para realizar una tarea, pero todos los dedos necesitan de la mano para tomar unidad y apoyo en ella, y de esa forma poder articularse para la realización de cualquier tarea específica.

Una mano sin dedos no es mucho lo que puede hacer, y los dedos sueltos, aún cuando conservaran la vida, tampoco podrían hacer una tarea dado que deben trabajar en conjunto, integrados e interdependientes. Este concepto tiene que ver con la política, con la economía, con la sociedad, con la supervivencia de la especie, y aún, con el secreto de la existencia del TODO.

Cuando la Energía del TODO necesita manifestarse en creaciones se asimila a una mano que emplea sus dedos, en cuyo caso, algunos de esos dedos serían los Ángeles; esos “dedos” angélicos no podrían existir sin su sustento armónico producido por la “mano” del TODO, y entonces, sin ir más lejos, este plano de materialización no podría tener lugar.

La materialización es sencillamente un proceso de descenso en la tasa vibratoria, o sea en la frecuencia de vibración, que trae la impronta de su Generador cuya esencia es altamente espiritual. La materia es una fotocopia con menor definición que su original; aún así, la materia contiene intrínsecamente elementos vibratorios de alta frecuencia que siguen leyes definidas, muchas de ellas todavía ignoradas evidentemente, porque hay fenómenos que muchos no pueden medir ni explicar, pero sí percibir cuando existe suficiente sensitividad.

El ser humano, en la búsqueda de su propia identidad, ha logrado penetrar en los secretos de la materia hasta cierto nivel. De esa forma ha descubierto algunos principios del átomo, que actúa como los ladrillos de una pared para formar la materia; y buscando investigar aún más, ha logrado reconocer la presencia de más de 200 elementos vibratorios dentro de ese minúsculo universo llamado átomo. Pero aún no ha descubierto QUÉ ES LO QUE PRODUCE EL MOVIMIENTO, LA ACCIÓN EN ESE ÁTOMO. Porque no contempla que ese átomo tiene un espíritu dependiente del TODO, y está vinculado en red. Y la esencia de esa red, se llama Amor, sencillamente.

Inteligencias superiores al hombre provenientes de distancias a millones de años luz, si bien visitan este planeta desde tiempos desconocidos, a partir del año 1945 han debido intervenir en este Sistema Solar al observar que el ser humano ha ido más allá de lo que sería prudente explorar, dado que los investigadores científicos en su concentración rigurosa para encontrar las leyes que rigen la materia y con el fin de poder servirse de ellas, han caído en cierto afán de negación de los procesos espirituales sin comprender que en realidad, sólo se trata de los cinco centavos que siempre les faltan para completar el peso.

Poderes que no pertenecen a nuestra especie humana siguen interviniendo constantemente en cuanto a sabotear nuevos descubrimientos tales como la antimateria, por ejemplo, porque consideran que sería como permitirle poseer para que juegue, un revólver cargado a un niño que aún no tiene conciencia de la muerte y la destrucción que puede causar.

Desactivan actualmente cabezas atómicas a distancia e intervienen impidiendo que se puedan concretar todos aquellos descubrimientos cuyos resultados, mal manejados, podrían destruir a nuestro planeta tal como ya fue destruido el “Planeta Amarillo” cuando sus habitantes quisieron jugar a ser dioses y cuyos restos forman hoy el Cinturón de Asteroides. Por esa razón, no debemos temer a que se desate una guerra nuclear, porque “ellos” no lo permitirán; misil que vaya con intención de daño, misil que desactivarán.

Sin embargo, afortunadamente se está desarrollando otra nueva mentalidad como la de aquel médico que está limitado a los conocimientos obtenidos de sus libros de texto donde por supuesto no figura el “empacho”, pero cuando va a realizar la práctica de curación de los enfermos se da cuenta que hay algo más allá que sus conocimientos convencionales. Y comienza la curación, curando el legendario empacho; en los niños este efecto suele ser determinante, ya que muchos de ellos no necesitan mayor tratamiento que ése.

Entonces este médico incursiona en conocimientos que no están en sus libros de texto y provienen de alguna otra persona con menor nivel de estudio científico que él, y aprende de ella cómo curar el “empacho” o bien, como efectuar los milenarios tratamientos de Reiki, y sin necesidad de medicamentos o tratamientos especiales, logra mejorar “mágicamente” la salud del enfermo “incurable” para la medicina convencional, sin el uso de medicamientos ni de costosos tratamientos. No hay muchos, por desgracia, pero sí hay médicos así, y cada día más; benditos sean ellos.

Esa actitud debería ser copiada por los investigadores científicos, pero lamentablemente sus mentes están tan estructuradas, tan condicionadas y limitadas por las filosofías de sus universidades que se hace muy lento el proceso; y de hecho, está siendo visto que los más lúcidos entre ellos han comprendido que deben buscar en otras partes si quieren obtener mayor conocimiento, y a pesar de que lo están haciendo, la rigurosidad estructurada de lo que se considera pomposamente como Ciencia, les obliga a ser prudentes en revelarlo para no ser ridiculizados por sus pares. Esta Ciencia siempre ha sido controlada por los Illuminati a fin de impedir el progreso del ser humano y su liberación; controlar la Ciencia tradicional siempre ha sido su mejor herramienta, pues se la ha impuesto como indiscutible para mantenernos sumergidos.

Sin ir más lejos, en el siglo pasado Carl Jung analizaba las leyes de la Astrología y los Arquetipos del Tarot, y de allí obtuvo mucha información que luego utilizó para la comprensión de las conductas humanas.

Otro ejemplo fue el Dr. Edward Bach, creador de su Sistema de Sanación mediante la aplicación de los principios de plantas y flores, que era Astrólogo y Espiritualista. Sin embargo, ellos no podían reconocer la fuente de muchos de sus conocimientos ante los otros profesionales porque eso les quitaría crédito, es decir, debían necesariamente pasar por ignorantes para ser considerados sabios frente a los ignorantes que se creían sabios. Una vieja actitud humana que parece nunca terminar pero que por fin ha llegado inevitablemente el tiempo de desmitificar.

Desde que se comenzó a diferenciar lo justificable de lo no justificable, los viejos alquimistas pasaron a ser investigadores universitarios, pero severamente limitados por la Ciencia en su capacidad. Esto ha mantenido retrasado enormemente el desarrollo del conocimiento humano, cuyos principios más evolucionados siguen hoy mantenidos en secreto por organizaciones, logias y hermandades que conservan esa sabiduría antiquísima a fin de que no se pierda ante la negación infantil, pero intere$$$ada de la Ciencia.

A nosotros nos enseñan en la Facultad la Ley de Gravedad de Newton y con eso nos limitan en nuestras creencias ¿Quién va a discutirle a un ingeniero que tiene su diploma colgado en la pared, aunque este señor sea cuadrado como un ladrillo? Pero, mientras tanto, cuando nos mantienen en la mentira con la excusa de la Ciencia, ellos se sirven de los conceptos de Antigravedad para su beneficio. Ellos fabrican naves y hacen viajes interestelares en secreto desde hace varias décadas mientras nos muestran los veteranos cohetes mejorados del Saturno por la TV.

Ello ha llevado a considerar un punto de vista ridículo, triste y limitado que señala que lo que no es visible, no tiene vida o no existe. Para la Ciencia, tanto los Ángeles como los Demonios, no existen, puesto que como manifestaba patéticamente hace 2.000 años el discípulo Tomás, “si no lo veo, no lo creo”, en su pobreza mental y espiritual.

Pronto hemos de ver cosas que nunca creímos que existían, y eso va a ser un suceso que puede traumar severamente a los dormidos, por ejemplo, aquellos que no creen que el TV pueda encenderse sin electricidad (hoy tuve un reclamo al respecto de alguien que no puede ver más allá de su nariz, y en blanco y negro), por más que hay videos en Youtube que muestran que pueden hacerlo simples seres desencarnados que han sido simplemente humanos, porque sólo se trata de energía. Lo peor del caso es la virulencia, la desvalorización y la intolerancia que dirigen hacia quien sin ningún interés pretende donarles sin costo lo que le ha llevado una vida aprender y constatar.

Por ejemplo, dentro de las categorías de estudio de la Escatología, una de sus siete disciplinas es la Angelología definiendo claramente a los Ángeles, sus propósitos y misiones de colaboración. Desde los principios de la organización a partir del Caos primigenio intervinieron estas criaturas destinadas a aceptar misiones y tareas, que podríamos asimilar como los “dedos” de la gran “mano” que constituye el TODO: Entidades Angélicas y Elementales.

Ciertas doctrinas nos explican que los Ángeles desde el principio, además de la organización de la Creación, tuvieron a su encargo el cuidado de civilizaciones similares a la actual del Ser Humano, ya sea como mensajeros, protectores, sanadores y guías en el camino espiritual de los hombres. Los Ángeles no tienen albedrío, podríamos asimilarlos a “robots espirituales”, por lo que nunca pudieron saber los propósitos de su gestación y tampoco fueron creados para interpretarla o para disentir, pero algunos de ellos, justamente los más inteligentes y audaces, supusieron que la creación de este nivel de baja resonancia, la materia, estaba destinado a su morada y a su campo de experimentación y aprendizaje de la vida sólida.

Ellos no sabían que estaba por ser creada una criatura que mostró poseer especiales capacidades materiales y divinas, tal como el ser humano, y que los planos inferiores dimensionales estaban destinados a su contención, aprendizaje y desarrollo. La mayoría de dichos Ángeles estaba en plena integración con la Conciencia Cósmica y aceptaban sin discutir sus misiones sin ninguna clase de cuestionamiento ni necesidad de retribución, fueran estas misiones las que fueran. Remarquemos que los Ángeles no poseen autodeterminación; simplemente actúan como soldados.

Pero una parte de ellos, caracterizados por alcanzar una menor tasa vibratoria (condición necesaria requerida para realizar la materialización) buscaba el reconocimiento (tratado en otro artículo) porque no incorporaba la suficiente Conciencia de su Divinidad como para aceptar ciegamente sin permitirse cuestionar la sabiduría de tales designios superiores.

Hay una versión que señala que esta obligada falta de integración a lo Superior motivó que al ver que el producto material de la Creación estaba destinado al hombre en lugar de constituir un premio a sus tareas superiores, estos niveles angélicos de menor vibración se sintieran en falta de aprecio y consideración, por lo que su actitud de desacuerdo los llevó automáticamente a desprenderse naturalmente de los niveles superiores por falta de armonía vibratoria.

Es así como dejaron de ser conscientes de su llama de Origen y al renegar de ella quedaron restringidos a bajar a la materia tal como el descenso de su vibración lo motivó. Es la actitud típica de los seres Elementales, que necesitan reconocimiento y premio para su servicio; si no lo obtienen, se vuelven enfurecidos en contra.

Su jefe, el “Príncipe de la mentira”, conocido vulgarmente como Satán, o el Diablo, se especializó en el desarrollo de la Dualidad, es decir, constituir el otro lado de la Verdad, que naturalmente conocemos como “mentira”. Y por eso es el Rey de este plano y su dueño absoluto; si no fuera el dueño de este plano no podría haberlo ofrecido a Jesús como precio a su ansiada conversión hacia sus tropas nefastas, lo que hubiera convertido a esta Entidad maligna en una Entidad mucho más poderosa aún de lo que actualmente es (o era).

De forma similar a Jesús, El Diablo no es un personaje individual; ambos constituyen la Esencia representante de una enorme cantidad de Conciencias unidas solamente por sus intereses comunes. En la 4ta. Dimensión, a este tipo de Manifestación masiva de Conciencias con mentalidad de colmena se la menciona como “Individualidad”, formada por una infinidad de Entidades cuyos propósitos son del mismo tipo luminoso, o por otra parte, opuestos a los de la Luz.

Otra versión indica que al igual que una mano no puede funcionar eficientemente si no utiliza el pulgar como oposición, la Luz creó la necesaria oposición a sí misma a fin de dar forma a la Dualidad en la que el Ser Humano se desarrolla y evolucionara; Júpiter (la Luz) y Saturno (la Oscuridad).

Según la religión, estos disidentes antes mencionados pasaron a ser entonces los “Ángeles caídos” pero no por gravedad sino por diferenciación en la tasa vibratoria, y se agruparon alejándose de la Luz original, pasando por contraste a ser llamados Oscuridad, aún siendo Luz pero de menor vibración energética. Dado que, para existir, todo tiene su propósito dentro de la Creación, adoptaron la función antagónica a los otros Ángeles y de esa forma asumieron el otro componente de lo que hoy llamamos Dualidad.

Por el contrario, otra versión más creíble señala que los “Ángeles caídos” fueron desplazados por la Oscuridad (Enlil) debido a su intención de ayudar a la Humanidad, tal como Prometeo (Enki), trayendo el fuego sagrado, o “la serpiente”, un reptiliano benéfico mostrando a Eva el camino (la manzana) hacia descubrir una verdad trascendente.

Sin embargo, esta Oposición a la Verdad, se sirve justamente de una verdad negativa conocida como Mentira o engaño, y ha invertido los conceptos a fin de confundir al ser humano, sabiendo que su naturaleza le llevaría a rendir culto a lo que él creyera que fue su creador. Es decir, pronto seremos instruídos de que la Iglesia que dice representar a la Luz es justamente la organización de Satán, y que los llamados “ángeles caídos” no son demoníacos sino, por el contrario, Entidades energéticas luminosas apresadas y confinadas, según algunos especialistas, en la Antártida.

Pero, así como los Ángeles originales de origen luminoso adoptaron las misiones de ayuda y cuidado de seres similares al hombre, estos otros decidieron constituir la misión de entorpecimiento y conspiración contra el Hombre. Dicha función antagónica fue aprovechada y permitida por las Energías Superiores porque de ese modo, seres en vías de desarrollo como el hombre se verían obligados a trabajar más sobre sí mismos, llegando a autoconstituirse por derecho propio como Entidades Divinas en el momento de lograr superar todas las limitaciones de la materia.

Por otra parte, esto se basa en el principio de que si el ser humano encontrara obstáculos hábilmente dispuestos, daría mayor velocidad y efectividad concreta a su desarrollo sobre la Tierra, porque debería esforzarse.

De otro modo, la Oscuridad ya habría sido absorbida y transmutada empleándose su enorme caudal energético para otros fines; pero dentro de los límites de la 3ra y 4ta Dimensiones anteriormente se les permitió cierto albedrío como para “poner piedras en el camino” de los seres humanos de forma que éstos aprendieran a superarlos elevándose por encima de dichas limitaciones. Así como los Ángeles, los Demonios también tienen su organización, que podría ser tratada en otros artículos posteriores debido a su elevada complejidad.

De todas maneras, Entidades Luminosas superiores ya han dado fin en el año 2019 a las tres cabezas nefastas que organizaban la oposición satánica (cuando comenté que había sido descabezado el Dragón) puesto que se consideró que la Humanidad había alcanzado ya la Masa Crítica luminosa suficiente como para formar el cristal generador del despertar de los dormidos, año 2021, y que ya no tenía objeto ni función que los tres Diablos Mayores que dirigían los procesos satánicos ejercieran su influencia sobre este planeta.

Sí es cierto, que, en el caso de los Ángeles, éstos en lugar de la conciencia variable del ser humano poseen un elevado sentido de la vocación de servicio, la que consideran como la razón de su existencia. Para los Ángeles, el realizar un servicio o cumplir una misión encargada por sus Superiores, ya es una satisfacción de por sí dado que es lo que les permite permanecer integrados a la Luz del TODO y disfrutar de las vibraciones del Amor que colman todas sus aspiraciones. Los Ángeles no evolucionan como nosotros los humanos, sino que ellos “ascienden” en su categoría y en el brillo de sus “colores” energéticos; eso les basta y sobra.

Los Ángeles no actúan por determinación y conciencia propia como el ser humano, el que posee libre albedrío en cuanto a experimentar y evolucionar como entidad independiente, sino que ellos se mueven por una entrega especial motivada por el Amor que los guía; ellos siguen precisas instrucciones y asumen sus misiones y responsabilidades, cumpliéndolas fielmente porque así sienten permanecer asociados a su Sistema de Amor, del cual se alimentan.

Ellos no necesitan de medallas y galones ganados en sus batallas, porque el Amor los colma, y disponen de toda su entrega al fin que se les ha asignado y el sólo hecho de cumplir fielmente los mantiene en estado permanente de Gracia y Exaltación, sagrada conexión que les habilita sus poderes y potestades. En cambio, el ser humano, con el fin de adquirir conciencia por sí mismo, debe transitar por todos los estados, desde los más bajos, hasta lograr tras cierta cantidad de encarnaciones y aprendizajes, alcanzar estos estados de vibración más elevados. Nótese que entonces, la especie humana tiene condiciones superiores a los Ángeles.

Por tal razón, en las Alturas, o detrás del Velo, las acciones del hombre sólo son consideradas como experiencias necesarias para el aprendizaje y no son juzgadas ni condenadas, aunque sí deben necesariamente ser controladas y limitadas a fin de no constituir una fuerza peligrosa para el desarrollo de la especie humana. Las fuerzas negativas nefastas entonces han llegado al extremo de sentirse habilitadas para LIMITAR LA EVOLUCIÓN DEL HOMBRE, pasando a ejercer la función opuesta para la que fueron creadas.

Es decir, en lugar de ayudar a la evolución del ser humano, han pasado a esclavizarlo y detenerlo. Por eso han debido ser retiradas por excesos en sus funciones, ya que su objeto en principio era colaborar a la evolución ejerciendo oposición, pero no represión al grado de esclavizar e impedir el desarrollo natural que las Entidades Superiores buscaban auspiciar.

El Amor ama, simple y genuinamente, porque no sabe hacer otra cosa que amar. Algo parecido es lo que moviliza a los Ángeles a realizar sus tareas de servicio sin cuestionamientos, ni necesidad de reconocimiento alguno. Contrariamente a lo que se cree, las velas y las estampitas no llaman ángeles, sino, por el contrario a otras Entidades que tanto pueden tener buenas como malas intenciones.

Por otra parte, ahora cabe mencionar a la otra familia antagónica a la de los Ángeles: los Demonios, que podrían ser considerados ángeles de polaridad negativa. Por tal causa, mis Guías me han advertido severamente que no los insulte, primero porque debo respetar su función que se supone que trasciende mi entendimiento como humano, y segundo, porque eso bajaría mi vibración y me llevaría hacia sintonizarme con ellos.

Todos somos Hijos del mismo Padre, tal como Caín y Abel. Pero hoy, la motivación de estos seres antagónicos no es el servicio ni la integración, sólo se preocupan por el intercambio de la energía necesaria para su primitiva subsistencia y para obtener poder, dado que han perdido la sintonía necesaria para su alimentación desde la Luz. Los Demonios han sustituido la necesidad de amor por la necesidad de poder; por eso, el ansia de poder en el ser humano lo aleja de los Ángeles y lo acerca a los Demonios.

La necesidad de obtener poder de estos personajes pone justamente en evidencia su debilidad, y sus primitivos requerimientos los muestran ubicados en la categoría menor que les corresponde, lo que a pesar de ello no los vuelve menos amados y reconocidos por “el Dueño de la Mano”.

En este caso, se trata de tribus de seres oscuros, espiritualmente débiles, frágiles, desarticulados, sufrientes, que desconocen la dignidad, el honor, la alegría del servicio, la pertenencia, y son incapaces de comprender la Luz que la Conciencia Cósmica representa y que a pesar de constituir una parte del TODO, tanto son capaces de atacar ferozmente como de huir como ratas porque sus únicas monedas de transacción son el miedo y el sufrimiento.

Justamente son los que imponen ese mismo miedo y sufrimiento a los seres humanos a fin de que los estados emocionales de las personas sensibles, emanen en el dolor, en el sexo y en el miedo, cierta sustancia energética etérea que complace y estimula las necesidades de los vampiros energéticos de la tribu oscura.

Representan solamente seres parásitos incapaces de superarse, hundidos en sus pobres miserias, dispuestos a ofrecerse al mejor postor con tal de satisfacer sus necesidades instintivas, aún cuando son mantenidos con vida por la Luz debido a razones de cumplir una función: la evolución de conciencia del Ser Humano, exclusivo poseedor de un alma.

Mirados Desde el Amor, como suelen decir mis Guías, al menos les debemos respeto y ecuanimidad, aunque sus acciones nos inspiren repulsión. Ellos sólo hacen lo que saben hacer y está en nosotros no dejarnos engañar; por esa razón LA LUZ NO PUEDE DESTRUIR A LA OSCURIDAD, Y NUNCA LO HARA, porque entonces traicionaría a su propia creación, generada para ejercer antagonismo, necesario para el aprendizaje del humano en esta Dimensión.

Pero para solicitarles sus “servicios oscuros”, aquellas personas de vibraciones primitivas que los utilizan en sus manejos, aprenden a conocer con qué clase de rituales convocarlos y qué clase de compensación u ofrenda deben entregarles como sacrificio para obtener a cambio su colaboración en pos de resultados deleznables. Éstos son los llamados Brujos Negros/Brujas Negras.

Llega a tal grado la falta de Conciencia luminosa de estas Entidades nefastas que muchas veces, estos mismos seres “comprados” para hacer un daño, son “comprados” por otro precio mejor para deshacerlo, e inclusive para devolverlo a quien lo lanzó. No son los Ángeles quienes disuelven los “trabajos nefastos” de los oscuros, sino son los mismos oscuros quienes son contratados para anularlos, porque justamente son ellos quienes tienen las “llaves” para neutralizarlos, ya que han sido de su propia creación. Tal como uno arma su tarea en un archivo PDF y luego le pone una contraseña para que nadie lo altere.

Esto se debe a la ausencia total de Conciencia Cósmica de estos personajes “angélicos” oscuros, tal como sucede con algunos humanos mercenarios que se venden exclusivamente por beneficios materiales sin diferenciar la categoría del servicio que se les solicita ni tampoco quién es el que se los encarga, porque no disponen de elementos para comprender cabalmente lo que está bien ni lo que está mal.

Sólo son humanos mal encaminados, que la Psicología llama “psicópatas” a los que deberíamos vencer pero sin encarnizarnos contra ellos; por eso, La Alianza determina que son necesarios los arrestos masivos pero solamente habrá ejecuciones en los casos irrecuperables y las necesarias sólo para que no arruinen la experiencia, aunque nosotros, las personas, ansiemos la liberación inmediata y la eliminación de los nefastos, en nuestra incomprensión del Plan. PORQUE HAY UN PLAN, no lo duden.

La característica que diferencia a estos seres oscuros, al igual que sucede con los seres humanos, es la soberbia y la indiferencia al sufrimiento que infligen, al grado de sentir cierto gozo o satisfacción porque su enemigo es el humano que ansía crecer. Dado que pululan en el límite de ambas 3ra y 4ta Dimensiones, tienen la capacidad de materializarse en la 3ra. y otras veces, disolverse hacia la 4ta. lo que no implica que pierdan sus capacidades de influenciar a las bajas vibraciones de la 3ra.

Esta clase de seres resulta incapaz de comprender el Amor y por eso temen a aquellas elevaciones espirituales que puede alcanzar el ser humano, quien es generalmente la víctima (y a veces, cómplice) de sus pactos insanos y nefastos. Ya ni siquiera buscan un reconocimiento de sus superiores, con tal de obtener su paga porque han perdido la conciencia de separar lo que es sano de lo que no lo es.

Resumiendo, debido a su baja vibración, estos seres oscuros no pueden alimentarse del Amor y deben subsistir a partir de la energía que obtienen de las emociones humanas descontroladas dado que no conocen otra forma que no sea la vampirización; la forma más común de absorber esta energía humana es causando el miedo y estimulando las pasiones más bajas de las personas. Ésa es la moneda corriente en la 4ta. Dimensión, su hábitat preferido. Por eso es que se recomienda confiar en la Luz y no tener miedo.

En esta situación, ellos encarnarían el papel de “los chanchos”, pero el ser humano sería “quien les da de comer” ¿Se entiende? Si no les diéramos comida, para lo cual todos deberíamos despertar, los chanchos se irían a buscarla en otro lado. Por tal razón aún no podían llegar los nuevos tiempos, porque aún si las cabezas hubieran sido eliminadas, el mismo ser humano estaría reteniendo esa oscuridad porque aún no ha llegado a conocer al Amor.

Así como los Ángeles trabajan en cooperación y de ello obtienen sustento para sus poderes, los demonios actúan en manada, muchas veces con el mismo propósito pero la diferencia estará en que las tareas angélicas estarán sincronizadas y respaldadas por su integración (como los dedos de una mano) mientras que en las tareas demoníacas, a pesar de la complicidad, reina el desorden y la deslealtad de forma que nunca un demonio defenderá a otro demonio, sino que huirá dejándolo abandonado a su suerte o a su desgracia sin que le afecte para nada lo que pueda ocurrirle a la Entidad semejante. Porque en su ceguera, la Oscuridad carece de códigos.

Esto es porque entre ellos no existe hermandad sino personalismos, aunque sí por temor, consideran y respetan liderazgos y jerarquías. He estado describiendo a los Demonios y por similitud, el lector verá reflejados exactamente a los ejemplares más bajos que podemos observar en la especie humana.

Queda claro, entonces, que podría entreverse que se ha remarcado la diferencia entre la dicha superior de la elevación por autovaloración, la que contrasta con la primitiva necesidad de reconocimiento.

La incomparable ventaja de pertenecer a la especie humana consiste en la oportunidad y en la capacidad de evolucionar y crecer. En un principio actuamos por retribución, más tarde evolucionaremos y accederemos a hacerlo simplemente por Amor.

Por tal razón, siendo ejemplares con tal capacidad de evolución, nosotros, los inconscientes y frágiles seres humanos somos envidiados y en otras ocasiones protegidos por otros seres, millones de años más evolucionados intelectualmente, que respetan por Amor la capacidad humana de llegar a convertirse en “los dedos” de la gran Mano Cósmica que constituye el TODO. Pero para eso, a fin de saber separar lo luminoso de lo oscuro, debemos comprender claramente la diferencia entre las motivaciones de los Ángeles y de los Demonios.

El Sendero Del Ser. Bendiciones. Leo

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