En los lagos y lagunas amplias, habitan seres del Elemento Agua en su forma Sutil, es decir, de naturaleza espiritual aunque con capacidad de corporizarse, ya que su existencia se manifiesta entre la Tercera y Cuarta Dimensión; bajo ciertas condiciones se dejan ver de lejos en nuestro ámbito existencial.

En las culturas indígenas americanas son reconocidos con distintos nombres, pero todas ellas saben de su existencia, por supuesto esto incluye las tribus indígenas argentinas sobre todo cordilleranas.

Hay una variedad de ellos, en su gran mayoría benévolos con el hombre aunque existen algunos ejemplares, los “Monstruos del agua” que no sólo buscan capturar al ser humano para sus fines espirituales, sino alimentarse de él. Por el contrario, los “espíritus de los lagos” pertenecen a una Tribu Sutil cuya esencia es una combinación de Elementos Agua-Tierra, y mayormente se conocen como “Ondinas de agua dulce”, o también es popular el nombre de “Náyades”. En Europa se les da otros nombres como Asrai o Menúfares.

Los Espíritus de los lagos son en su mayor parte femeninos, de porte pequeño, y de buena predisposición hacia el ser humano. Solamente cuando las aguas son saladas, agrias o duras, se generan ejemplares masculinos. Estos seres no son naturalmente agresivos al hombre, salvo si son agredidos; en ocasiones se cuenta que han ayudado a llegar a las costas a personas en peligro de ahogarse.

A finales del año 2017, mientras yo estaba en la zona cordillerana de Caviahue (Neuquén, R.A.), se ahogó una pequeña niña de 7 años, por lo que enseguida pensé que podía haber sido capturada sino en su cuerpo, en su alma y llevada al fondo del lago. La captura de almas se puede producir en dos momentos claves, cuando nace o cuando fallece la persona.

Para mi alegría, luego de una tirada de Tarot solicitada por una persona amiga de la familia, comprobé que si bien su cuerpito estaba oculto en el fondo, su alma se había desprendido con rapidez y había partido hacia la Luz, encontrándose en plena felicidad y alegría como todas las almas que dan por terminado un ciclo aquí en la Tierra y se desprenden completamente de los sufrimientos materiales.

Las características sulfurosas y agrias del agua del lago Caviahue probablemente hayan dado origen a ejemplares masculinos cuyas características son más agresivas, pero la tirada de Tarot dejó bien en claro que el suceso fue simplemente un accidente debido a las arenas sueltas y la pendiente del lago, y lo más importante, fue que el alma de la pequeña partió libremente hacia su Origen, a experimentar la feliz unión con sus otros Segmentos, y a reposar en el período de paz previo a la planificación de su próxima encarnación.

De haberse tratado de un secuestro de seres del lago, tal como algunas personas de la zona temían, muy distintas hubiesen sido las cartas en la tirada, como he visto que suelen aparecer los Arcanos en casos de muertes sospechosas e intervención de terceros.

Regresando a su descripción, los ejemplares femeninos de esta Tribu de Agua son pequeños, y su apariencia es bella y su comportamiento muy tímido, siendo su tarea esencial el servicio hacia otras especies y las otras clases de seres acuáticos con quienes comparten su hábitat.

Estos seres sutiles se encargan de purificar el agua de los lagos y ayudar a que no se sequen mediante la construcción de impedimentos para que el agua no se escape de la cuenca natural.

Tienen la capacidad de controlar las lluvias y con eso regulan las alturas de las aguas en los bordes de los lagos. No hay lago que no posea estos Espíritus, que han sido vistos en zonas cordilleranas de las provincias de Neuquén, Río Negro y Chubut en Argentina; siempre se insinúan en el anochecer y en la noche ya que los rayos del sol les resultan sumamente dañinos, por lo que durante el día se mantienen ocultos en las profundidades del agua.

Su esencia es benefactora del ambiente en el que viven, en el que buscan armonizar y equilibrar el entorno; poseen su propio lenguaje de sonidos y no suelen comunicarse verbalmente con el ser humano. Son seres alegres, bellos y armoniosos aunque poseen aletas y escamas como sus vecinos los peces; se ha notado en ellos cierta luminosidad y movimientos similares a la danza sobre la superficie del agua, pero siempre al anochecer y al ocultarse la luz diurna.

Los tamaños de sus cuerpos son variables, desde unos 20 cm como un duende hasta la estatura de una mujer, pero su característica es la belleza de sus rostros y formas. Cuando se asemejan a mujeres, son delgadas y de cabellos rubios, con inteligencia reducida que no interpreta ideas complejas,  poseen un lenguaje muy elemental y son de carácter estable, con rutinas generalmente monótonas.

La alegría de estos seres se manifiesta mediante la danza nocturna, en las que a veces pueden apreciarse algunas vestimentas y adornos; también se muestran cantando mediante sonidos armoniosos, buscando encantar y armonizar el lugar donde se manifiestan.

En zonas más llanas, como ser en la provincia de La Pampa (Argentina), se suele dejar ver un ser de esta Tribu conocido como El Arumco, en las lagunas de Urre-Lavquen y La Amarga, y algunas otras lagunas menores. El Arumco tiene la forma de un sapo grande con rostro de niño y los lugareños consideran que su hogar está bendecido cuando este pequeño ser los visita, vestido a veces con una vincha y hasta con una pequeña lanza en sus manos.

Se lo considera enemigo de todo lo diabólico y cuando es visto en época de sequía todos se alegran porque presagia lluvias, y al verlo caminar por las zonas llanas saben que está llamando a la lluvia. Los aborígenes dicen que habla la vieja lengua araucana, pero que no se comunica con personas desconocidas, porque le molestan los ruidos y las personas muy habladoras. También suelen oirlo cantar con voz melodiosa en los atardeceres desde el medio de las lagunas.

Una Tribu Sutil pero de Agua y Aire, ligeramente diferente de lo ya mencionado, son las “Ondinas de los vapores”, seres sumamente pacíficos que se dejan ver cuando la superficie del agua es evaporada por el sol, paseando por el agua y el aire, para lo cual poseen unas alas más parecidas a las aletas de los peces. En ocasiones, solamente se observa su presencia como grandes burbujas que surgen del agua y quedan estáticas sobre la superficie.

A veces, cuando la mente de un hombre en las inmediaciones es “poseída” por estos espíritus, producen en ella un encantamiento y una paz que le impiden moverse; a la caída del sol, será liberado y sentirá una paz interior y una quietud especial dado que estos seres tienen la capacidad de “limpiar” todo lo negativo que había en la mente de la persona, pues su función es la descontaminar y purificar el ambiente natural que los rodea.

Otra de las Tribus Sutiles de Agua es la de los “Genios de los ríos”, que por su elevada movilidad se encuentran dotados de gran inteligencia y de allí su nombre; suelen intervenir tanto en la vida o en la muerte de quienes se aventuran en los ríos. Son criaturas de cualidades refinadas y gustan de la música y de lo bello, tan capaces de encantar a quienes contemplan las aguas como de provocar miedo en ellos como para que huyan si no les gusta esas personas.

Pueden cambiar de formas, a veces tomando formas horribles para asustar a los que puedan verlos, y esta Tribu tiene poderes como para el secuestro de personas o captura de sus almas a las que llevan al fondo del río encapsulándolas de modo que ya no puedan retornar a tierra.

Su estrategia es hacer aparecer objetos similares a joyas en la superficie o en las orillas, los que nunca deben ser tomados para no caer en su engaño, pues por medio de esta carnada las personas son atrapadas y tironeadas hasta el fondo. Los peces son sus “rebaños” y los mismos son protegidos por ellos de los pescadores.

Es fácil reconocerlos cuando salen a tierra por sus ropas mojadas y su apariencia de jóvenes adolescentes; siempre sería necesario observar sus ropas antes que su mirada puesto que la vista de sus ojos paraliza a la persona, pero cuando se sienten desenmascarados porque la persona se retira, desaparecen de la vista.

En tales ocasiones es necesario hacer que escuchen que uno les dice en vos alta que los ha descubierto, que no son humanos, para quedar completamente a salvo; siempre sus ropas estarán mojadas porque necesitan el agua para que no se arruine su piel. Los Elementales quedan en estado de shock cuando se les dice de frente que han sido descubiertos o que descubriremos sus secretos; rápidamente se evaden de la situación, en silencio, y se alejan de la vista.

Habitan en casi todos los ríos; en Argentina, en el Río de la Plata y hasta en la Bahía de Samborombón se han dejado ver. En Europa les han dado nombres regionales como Feneteen, Nikkisen, y otros de difícil pronunciación, y han llegado a estas tierras probablemente acompañando a los inmigrantes cuando los barcos venían a América o bien con los españoles durante la época de la conquista.

El Sendero Del Ser. Bendiciones. Leo

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